Un momento importante del día para el cuerpo, la mente y sobre todo socialmente en Suecia es el «fika», tanto a media mañana como por la tarde. Funciona como un pequeño paréntesis, hagas lo que hagas en ese momento, para tomar un café y algo dulce o un pan con queso o algo de fruta.
Siempre que visitas a alguien o quedas por allí te ofrecen un «fika» y lo más típico para acompañar el café es el «kanelbulle» casero:
Mezcla 150 gr de mantequilla derritida, 5 dl de leche, 50 gr de levadura fresca, 1 dl de azúcar, 0,5 cucharadita de sal, un poco de cardemoma (opcional) y, finalmente, 850 gr de harina de trigo. Cuando tienes una masa uniforme la dejas reposar 45 minutos y después la extiendes a un rectangulo y lo untas con un poco de mantequilla y echas un poco de azucar y canela. Luego la enrollas y la cortas en rodajas. Colócalas en la bandeja de horno, deja reposar otra media hora casi y pinta los «bullar» con huevo batido. Puedes poner un poco de avellana, almendra o azucar encima – según gusto – y al horno 225 grados hasta que tengan un color dorado.
Disfruta de un «fika» (un paréntesis) delicioso!
Q pinta tienen ana los voy a hacer en casa q a las niñas les encantarán.
qué ricos !!!
Y me gusta lo del fica. Es como el kit-kat, jeje.
Que buena pinta! No se sí me saldrán así pero lo intentare,que hambre…..!tenemos que hacer algún taller de cocina para que nos enseñes esos dulces y panes tan ricos que haces…!hasta pronto