El otro día busqué en una librería un libro sobre Julio Cesar de Conn Iggulden, un famoso escritor inglés. Sus libros son fascinantes – sobre todo si te gusta la historia… Al no encontrar lo que buscaba en la estantería pregunté a la dependienta que fue a mirar en su ordenador: «No, este libro ya no existe. Es muy antiguo – del 2005.»
!!!!!!!!!
… y yo que pensé que un libro vivía para siempre.
¡Muy cierto lo que dices! A mi también me ha pasado en varias ocasiones, ir a pedir un libro y que te digan que no existe. ¡Feliz domingo!