Hoy se celebra «Midsommar» (mitad-verano) en Suecia y es una fiesta tan importante y llena de tradición como la Navidad.
Me despierto por la mañana y salgo a coger flores para prepara mi corona – y con eso estoy ocupada hasta la hora de comer. De menú hoy siempre se sirve arenque y patata nueva. Después subimos toda la familia a la colina más alta del pueblo para reunirnos con todos los vecinos de todas las edades. Llevo mi corona de flores que, para que no se estropease puse en agua antes de comer y ahora me moja la cabeza, la cara y los hombros con grandes gotas frías. A causa de que el tiempo sueco de verano es muy caprichoso es imprescindible llevar chubasquero, jersey de lana y spray antimosquitos. Juntos todos, y acompañados por música de violín en vivo y directo, vestimos la Cruz de Midsommar con hojas verdes y flores. Una vez listo bailamos, asamos carne y probamos las primeras fresas de la huerta con nata. Los que tenemos menos sueño nos quedamos toda la noche bailando en el pajar de al lado y los más valientes se tiran al lago antes de meterse en la cama con 7 flores distintas bajo la almohada para conseguir la suerte infinita en el amor.
Qué bonito, gracias por compartirlo 🙂
Un abrazo.
Me parece una maravillosa tradición y que bien suena todo lo que cuentas.
La idea de levantarse por la mañana para recoger las flores que utilizaras para las coronas se me dibuja tan apetecible….
Las fresas… recién cogidas….
Has metido las flores debajo de la almohada?
No me hace falta 😉
Lo se pero yo siempre digo «lo que abunda no daña».
jeje
que hermoso!!
Muy bonito !
Bonita tradición, Anna. ¿De verdad hay tantos mosquitos? Pensaba que los bichos eran más del sur que del norte.
Hay muchos mosquitos (tanta humedad) y además son ENORMES!
Ana como están los niños de guapos .un besito
🙂
¡¡Que tradición tan bella, Anna!! Y que hermoso transmitirsela a los hijos. Deseo que con flores o sin ellas, la suerte y la felicidad te acompañen 🙂