Esperando en la puerta de la imprenta con humo saliendo de la boca, por el frío, capturando los primeros rayos de sol de invierno.
Los frenos de los autobuses chirrean. Niños con mochilas en camino al colegio. Pasos de tacones rápidos en la acera. Un perrito levanta la pata. Cerraduras se abren. Unos Nike’s pasan corriendo… «just do it»…
Busco la puerta de la panadería de la esquina y al entrar me arropa el olor a pan recién sacado del horno y la aroma calentita de café…
Otro día – nuevo día.
jeje… dan ganas de esta ahí.
Granier ¿no? Me encanta.
No… panisimo creo que se llama… 😉
mmmm que rico el olor a pan recién hecho!!! 🙂
Excelente blog! Escritura muy simple y del alma! Un abrazo
Muchas gracias!!
Me gustaría poder pulsar ‘me agrada’ en varias de tus páginas pero no hallo el botoncito.
Te agradezco la visita a mis photos.
Javier
Gracias!!
Me encanta como describes la calle, me has hecho estar ahí
Te pongo un me gusta con palabras. Y un saludo, de paso.
😉 Gracias!!!
😉 Gracias!
No hay nada mejor que llegar por un pan recién horneado y un café antes de llegar a la oficina… ese inigualable aroma enamora.
Excelente día Anna.
Si – sin duda un buen comienzo…
El olor a pan tierno es maravilloso! El pan con nueces…. mucho más 😉