Este fin de semana me ha llenado tormenta y calma. He disfrutado del fuerte viento tirando de mi pelo y de mis pensamientos, del cielo espectacular de tormenta dando un tono mágico al campo. También he disfrutado de momentos delante de la chimenea con olor a encina y marshmello, de ratos con niños y un puzzle interminable y, como no, con la acuarela.
Siempre he pensado, y con la edad mucho más, que las cosas sencillas y la buena compañía no tienen precio.
Que tengas una buena semana.
Si, es verdad… aunque, según la gente, el tiempo pasa cada vez más rápido con la edad yo, personalmente, pienso que con el paso de la vida se aprende ver las pequeñas cosas y disfrutar de los breves momentos.
También te deseo una bonita semana!