Tesoros

 

Aprovechando un día de sol antes de la lluvia ayer recogí aceitunas. Tenemos cuatro pequeños olivos en nuestro jardín, de los cuales dos han nacido espontáneamente, y este año es el primero que dan una cantidad de fruto suficiente para curar un par de botes.

Disfruto tanto poder aprovechar los pequeños tesoros que nos regala nuestra parcela; los nísperos, los madroños, la hierbabuena, los tomates, los higos, las almendras,… Poca cantidad pero lo preciso para hacerme sentir privilegiada.

Recolectar aceitunas con el sol suave de noviembre brillando en mi rostro, escuchando los pájaros acompañados por los abejorros que todavía encuentran néctar en las flores del madroño, me llena.

La naturaleza me arropa.

Esto es calidad de vida.

Por fin…

… empiezo a confiar en que la primavera se ha llenado de sol y calor hasta que toca al verano hacer su entrada.

Disfruto de cada momento:

El de la temprana hora con su aire fresco, el rocío y su luz nítida.

El de medio día con las puertas de casa abiertas de par en par y las voces de los niños como eco por cada rincón del jardín.

El de después del atardecer con su calma llena de sonidos de noche y reflexión – un día mas…

Un día mas rica…

flor pasklilja